Los términos tilingos, cipayos, otarios solemos hallarlos en los escritos de los pensadores nacionales. En estos tiempos, y gracias a la última obra de Dante Palma, “El gobierno de los cínicos”, podemos agregar dos conceptos más para entender a las mentes colonizadas y que nos llevan a la entrega total: “idiotas y cínicos”.
Por Gabriel Princip
Dice Dante Palma “Veinticinco siglos atrás, en Atenas, el vocablo “idiota” estaba reservado a aquellos individuos que despreciaban los asuntos públicos y solo se preocupaban por su goce privado”.
El concepto ha cambiado con el tiempo y en los integrantes del gobierno nacional podemos hallar el término con las características modernas pero también antiguas.
Del concepto cínico también se explaya Palma:”En la antigüedad, se llamaba cínico a quien, desde su insolencia plebeya, desafiaba al poderoso y, con esa actitud, ponía en riesgo su vida. Con los siglos el término se reservó a aquellos que mienten aviesamente sin pudor o que, con distintos recursos, defienden lo que es difícil defender. Pero el cambio más relevante fue que la insolencia del que nada tiene devino prepotencia del que tiene todo y el cinismo se transformó en el rasgo distintivo de una cultura atravesada por un capitalismo que exalta al tiempo presente y ofrece antidepresivos a quien no puede sobrellevar la obligación de ser feliz”.
La pregunta que nos inquieta es: ¿Existe un gobierno con idiotas, cínicos, tilingos, cipayos y otarios? La respuesta la obtenemos en cada declaración amarilla, en cada fallido, en cada mentira que se propala en cadena por los medios que cumplen su labor de voceros de las corporaciones.
Escuchar a un presidente decir “uno más uno es tres”, “mala mía”, “universidades por todos lados”, “un puerto en Santiago del Estero”, “no chupen de más” o fallidos como “hace cinco años que la Argentina tiene problemas de destrucción de empleo”, “estoy tratando de hacer lo mínimo imposible”, es pensar seriamente en los conceptos explicados por Dante Palma. Si agregamos algunos fallidos de sus colaboradores como “La Argentina crecerá en el tercer semestre”, “cambiamos futuro por pasado” o “protegeremos a los que más tienen” entendemos que desde el pensamiento de Jauretche y Scalabrini Ortiz, este gobierno es cipayo y entreguista conformado por tilingos. Pero si avanzamos en el tiempo Dante Palma tiene razón es un gobierno de cínicos.
