Por Mariana Mei
Manuel Belgrano tuvo un pensamiento económico poco tenido en cuenta identificar a la agricultura como fuente de riquezas pero asimismo consideraba necesario agregarles valor. Es decir que la industria y el comercio eran su devenir lógico. En consonancia con las ideas de impulso económico cada 16 de agosto se conmemora el Día del Empresario Nacional, se recuerda la conformación de la Confederación General Económica (CGE) en 1952, una entidad que jugó un rol fundamental en la historia económica del país. Su fin era promover un Estado moderadamente intervencionista, alineado con el concepto social de la empresa y con distancia de la gran burguesía ligada al capital extranjero. En 2024 y en las antípodas de esta línea de pensamiento, el Presidente Javier Milei entiende que el problema del rezago de las inversiones se debe a la excesiva intervención del Estado y a la presión impositiva. Incluso se sucedieron una serie de decisiones de índole anti-industrial que afectaron el desempeño de los sectores productivos. Suba de costos en la industria – Impuesto PAIS, Aumento de tarifas, varias aristas del DNU 70/2023 como la derogación Ley de Compre Nacional, la derogación de la Ley 21.608 de promoción industrial; los impactos en economías regionales; Eliminación o baja de aranceles de importación; Cambios régimen antidumping; Eliminación de créditos productivos para la inversión en pymes . También dentro de la Ley Bases, la habilitación al cierre del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y el Desfinanciamiento de programas y áreas asociados a la política industrial.
Hoy tienen mejor prensa la dinámica financiera y productiva que se alejan del valor agregado, de las chimeneas industriales que fueron promesa de porvenir para muchos ciudadanos que eligieron este terruño como Patria.
¿Cuál crees que es el camino que debe desandar la industria y el comercio en Argentina?
