Muerte silenciosa
Por Gabriel Princip
El nefasto plan de la derecha votado por 14 millones de idiotas está cumpliendo con su cometido. Las peores fiestas y vacaciones de la historia vivida por los argentinos mientras el subnormal velaba por la cucha de un perro muerto y el radicalismo usaba la calculadora para saber el precio de cada uno de sus integrantes.
Existe una muerte silenciosa que es parte del plan porque si el argentino promedio cree que el discapacitado llegó para cambiar el modelo económico está equivocado. El subnormal ahijado del mafioso tiene un plan paralelo que es la supresión biológica y con ello se consagra con la elite que entiende que debe haber una reducción poblacional.
Están aumentando los suicidios, los acv y la hambruna. Muertos que no salen en los diarios. Ese privilegio lo obtienen aquellos que caen víctimas de la inseguridad mientras la gorra de la ministra utiliza a sus huestes para cortar la protesta social.
El gobierno de Macri colonizó nuevamente a la Argentina con una deuda impagable y otra a cien años, trabajo del Toto Caputo. De esa deuda se fugó el 66 por ciento para sus amigos y él cobró 1200 millones de dólares.
Dato que los medios omiten, lo saben, pero la crítica llega hasta ahí. El segundo tiempo de Macri con su subnormal empleado será para regalar las riquezas y dividir en regiones el país. La gente, mientras tanto, lucha por un mendrugo, por llegar hasta la mitad del mes, por alcanzar la dicha de poder pagar un alquiler y se entretiene con el Gran Hermano artístico que emite la televisión y el Gran Hermano político manejado por un Menem.
La gente de a poco cae enferma y luego muere. Nadie se entera salvo su familia. Las parejas no planifican la formación de una familia, dato que comenzó a caer en el 2016. El poder ataca sin piedad. Fragmenta la política, berretiza la música, destruye la familia y apuesta sus fichas para generar más divisas con la utilización del género.
Una vez un miembro de las grandes familias confesó “el feminismo es un invento nuestro. Antes estaba la mujer en la casa y criaba y educaba a su hijo. Hoy la poseemos. Sale a trabajar, origina gastos e impuestos y sus hijos lo adoctrinamos en nuestras escuelas. Mejor negocio imposible”.
La muerte es silenciosa. Empieza el poder atacando a los dos cerebros, el otro es el intestino. Los alimentos son caros y el 90 por ciento origina cáncer. Los periodistas, fieles espadas del poder, atacan al cortisol del humano o sea la hormona del estrés y lo pone en la hilera de la muerte. La oxitocina, la hormona de la felicidad se despierta con las cosas buenas, la cultura, la solidaridad, la cosa colectiva. Bien los soldados del poder atacan estas tres opciones. La muerte es silenciosa y no se publica. Las familias consolidan el nuevo orden mundial gracias a
sus grandes actores, los políticos, que entregan a sus amigos a cambio de un cargo, un auto o
unas vacaciones. Fáciles de comprar y el parlamento es un gran shopping. Un lugar donde
adquiere su legislador a precios módicos. Esta semana la promoción es dos radicales y un
tucumano. ¿Oferta imposible de igualar, no le parece?
