MunicipiosProvincia

Martiniano Molina: “La clave de la gestión está en el trabajo en equipo” – L. Benítez

Así lo manifestó el intendente de Quilmes, Martiniano Molina al referirse a los primeros dos años al frente del Ejecutivo local y al reciente acompañamiento de los vecinos en las urnas. El futuro del distrito y “la profundización del cambio”, fueron algunos tópicos abordados por el Jefe comunal.

Por Laura Benítez.

La casa de la cultura, un histórico edificio, actualmente restaurado y modernizado, fue el lugar de encuentro. Una linda oficina, de paredes blancas, ventanas grandes y techos altos fue testigo del extenso dialogo que Comunas mantuvo con el intendente de Quilmes, a pocos días de las elecciones de medio término y por las cuales CAMBIEMOS logró imponerse por poco más de tres mil votos ante Unidad Ciudadana y lograr cinco bancas –que se suman a las cuatro ya existentes- dentro del HCD local.

Molina asumió en diciembre del 2015, luego de haber cosechado un enorme caudal de votos -146.263/ 44,09 %-, el mismo que desplazó a la inefable gestión de Francisco “barba” Gutiérrez -entonces FPV- de la gestión comunal.

-¿Cuál es el balance que hace de estos casi dos años de gestión al frente del Ejecutivo?-inicié.

Es muy positivo– respondió cordial y dispuesto al dialogo-. El cambio se nota. Se nota en calle, en el Municipio cuando vas a hacer algún trámite. Se recuperó el sentido del servicio, por parte de los trabajadores municipales.

En esa línea, y en consonancia con muchos Jefes comunales, remarcó que “los Trabajadores son el corazón del Municipio”, el primer mostrador al que los vecinos llegan para reclamar respuestas, atención, asesoramiento. “El sentido del servicio, creo que nunca lo perdieron, en realidad, encontraron eco en esta nueva gestión, con una forma de trabajar distinta, con ganas, en equipo”.

Las obras que se están ejecutando, también formaron parte del balance de los 24 meses de gestión: “El plan de obras es el más importante de la historia del distrito”, ponderó Molina. Y explicó: “se está haciendo a nuevo la Avenida Camino General Belgrano; la Avenida Calchaquí, con ensanchamiento y materiales de calidad; el re-encarpetado de las avenidas de este a oeste del distrito; el ensanchamiento de la Avenida Mitre; el bajo vías en Bernal –ya se inauguró el de la calle Espora-, el de Ezpeleta –en la calle José Hernández- y el de Don Bosco se encuentra en etapa final; un plan de obras hídricas, con el apoyo de Nación y Provincia para evitar inundaciones ya sea por sudestadas en la Ribera o por el desborde de los dos arroyos que llegan al distrito –Las Piedras y San Francisco-”. (Ver recuadro: La gestión en obras)

Quilmes es un distrito con 94 kms², con una población cercana a los 700.000 habitantes. Es considerado el tercer partido más poblado del Conurbano Bonaerense. Padece problemas de años y promesas de obras incumplidas.

La demanda social y la proliferación de asentamientos, son algunas de las problemáticas más difíciles que le tocan a la gestión. “Quilmes vive una situación muy compleja desde lo social y la va a seguir teniendo por un tiempo porque esto no se resuelve de un día para el otro”, definió. “Todavía tenemos situaciones difíciles por el crecimiento -durante los últimos 10-15 años- de asentamientos, sin ningún tipo de regulación u orden. Familias enteras ocupando terrenos contaminados, privados, sin ningún servicio básico. Es muy complejo. No estoy de acuerdo con echar a las familias porque toda familia debe tener su tierra, su casa, su trabajo, que son la base de la dignidad. Pero lo que hemos hecho desde el inicio de la gestión, como política de Estado, es no permitir más tomas y acercar a los barrios más humildes las herramientas del Estado y de distintos Organismos para regularizar su situación y dignificar sus condiciones de vida”, explicó.

La ubicación de Unidades Sanitarias; la instalación de servicios básicos como la luz, el agua, las cloacas –se prevé llegar al 80 por ciento de los hogares, al fin de la gestión-; los tráilers de documentación, vacunación; la mejora en los accesos a las barrios; la recuperación de los espacios públicos, la erradicación de basurales a cielo abierto y la instalación de plazas y puntos verdes, son algunas de las iniciativas que desde el Estado Municipal, Molina afirmó estar llevando adelante para atender lo social. “Obras de urbanización y de fuerte presencia del Estado, al lado de las necesidades de la gente, con todas las herramientas disponibles, es lo que venimos realizando todos los días de la gestión”, redundó.

“Es muchísimo lo que se está haciendo. Aún falta. Soy muy crítico, soy el primero en decir que a muchos lugares no hemos llegado como me hubiera gustado. Pero también es cierto que hay muchísimas necesidades a cubrir. Y, en esto, es fundamental que todos entendamos que hay que hacer un aporte, más allá del pago de nuestras tasas e impuestos, con una mirada solidaria”.

-¿Qué vino a plantear Cambiemos para Quilmes?

Otra forma de hacer política, de la política como herramienta de transformación, al servicio del vecino, con funcionarios cumpliendo sus tareas, con un Estado presente y esforzándose por llegar a dónde aún no pudo. Vinimos a cambiar las cosas en serio, no a enriquecernos. Creo en los hombres con voluntad de trabajo, de transformación y para eso hay que seguir trabajando. Creo que vamos por el camino correcto.

-Si bien tenés una historia familiar de militancia, venís de otro ámbito… ¿cómo fue llegar al Ejecutivo municipal sin haber pasado por cargos anteriores?

Hay una característica personal de no tenerle miedo a los desafíos, siempre respetando el riesgo, sin ser un inconsciente. Me pasó lo mismo con el deporte y lo mismo con la cocina. Nunca me gustó la comodidad, no me siento cómodo en la comodidad. Me gustan los desafíos y ser Intendente es un desafío enorme.

Vengo de una familia laburadora, en la que no faltaba nada, pero en la que todos colaborábamos con las tareas cotidianas de la casa. De chico aprendí lo que es el trabajo, a esforzarme por las cosas que quería, a que nadie las haga por mí y eso es un orgullo porque te planta en el mundo de manera distinta.

Mi padre –Jorge Molina- siempre militó, estuvo en el Gobierno local, en la Provincia. En cambio, yo no tuve militancia política sino vinculada a la vida sana, a los hábitos saludables, a una educación más humanista –la pedagogía Waldorf-; la participación en el tercer sector vinculado a tareas solidarias, que me guían en el camino de la política.

Cuando surgió la propuesta de involucrarme en la vida política del distrito, me ofrecieron participar desde distintos espacios del Peronismo, pero ninguno me representaba; no les importaba conocer qué pensaba, qué hacía o hice y me hacían propuestas ridículas. Hasta que apareció Cambiemos y me sentí representado por el gran cambio que vinieron a proponer: un Estado en la calle, dando explicaciones, respuestas, algo que se había perdido en la gestión local, muy propio del viejo Peronismo que se transformó en clientelismo, prebendismo, porque cuando llegué a la gestión la realidad dolía, había más de 100 asentamientos y villas y cerca de 170 mil vecinos en estado de vulnerabilidad total. Un Estado que se había olvidado de los que más sufren. Eso estamos intentando revertir.

La resistencia

-No lo digas en pasado- me corrigió al consultarle por las resistencias que tuvo que enfrentar al llegar al Ejecutivo local.

-Seguís lidiando- insistí.

“Quilmes tiene una gran heterogeneidad en lo político. No es sencillo. Es un laburo constante y cotidiano, de estar, de mirar. Ha llegado la hora de la nueva política, de sentarnos alrededor de una mesa a discutir –algo que hacemos todos los días en la gestión-, sin esconder la cabeza, caminando el territorio, poniendo el cuerpo, no solo en tiempos electorales”, explicó.

Molina llegó al gobierno a suceder a Francisco “Barba” Gutiérrez, quien fue durante dos mandatos intendente del distrito por el FPV. “Llegamos a la gestión por mandato de los vecinos y no vinimos a hacer una lavada de cara, a mantener el status quo, vinimos a hacer una transformación en serio, en línea con Mauricio y María Eugenia, para que el cambio le llegue a todos, no a un grupo”, remarcó.

“El hecho de haber realizado el trabajo que se hizo entre Nación, Provincia y Municipio para generar una nueva llegada a los barrios y a los vecinos, eludiendo a los viejos punteros y llegar con el Estado en tu barrio; con el Programa cerca de noche; el Mercado en tu barrio; con los operativos de salud, de zoonosis, del ANSES, del PAMI, de DNI –entregamos más de 50 mil-. El acompañamiento de Organismos nacionales, provinciales, locales. Esa es la clave, trabajar en equipo, con funcionarios que respondan y cumplan con sus funciones, sin especular, al servicio de la gente”, añadió.

“El Estado presente en los barrios habla de un cambio absoluto en las políticas del Estado”, remarcó.

¿Martiniano 2019-2023?

-No me desvela. Me gustaría que Quilmes mejore en todos los aspectos, conmigo o sin mí- respondió. Previsible.

-La respuesta políticamente correcta- advertí e insistí:

-Lo pregunto porque es difícil pensar “la transformación en serio” en solo cuatro años de gestión.

“Cuatro años son pocos. Arrancamos la gestión queriendo resolver el tema de la basura y eso se resolverá en 5 o 6 años porque el distrito casi duplicó la cantidad de basura que está llevando al CEAMSE. Toda esa basura, antes descansaba en los basurales a cielo abierto, de los que todavía hay muchos. Me desvela el tema de la basura y cómo afecta a la calidad de vida de los vecinos. En 4 años no llego a resolverlo. Si la gente me elige, si tengo ganas, fuerza, seguiré al frente”, respondió.

-¿Cuál es el análisis que haces de la elección, del triunfo ajustado que revirtió el resultado de las PASO?

Lo que sucedió en las elecciones del 22 de octubre es un apoyo, en un distrito muy complejo, donde a los Intendentes en las elecciones intermedias se les hace difícil. Logramos un caudal de votos -142 mil aproximadamente- casi a la par de lo que habíamos logrado en el 2015 -146 mil-, que fue la elección con mayor cantidad de votos para un Intendente. Esto habla de un apoyo a la gestión. También, habla de lo que es la Tercera Sección Electoral, donde Unidad Ciudadana se impuso. Pero, también, de un impacto rotundo de Cambiemos en todo el país. A su vez, pudimos revertir la elección de agosto, donde habíamos perdido caudal de votos. Creo que lo revertimos porque pudimos llegar a más barrios, aunque aún falte, explicándole al vecino nuestras propuestas, las obras proyectadas y las que están en ejecución son visibles a todos, pensadas para transformar el distrito, para dignificarlo, luego de años de abandono. Hubo una profundización del vínculo con el vecino, de cercanía y contacto verdadero.

El resultado nos fortalece como espacio y nos impulsa a seguir ordenando y transformando el distrito.

-¿Qué se viene para Quilmes luego de este resultado?

Siendo minoría en el HCD pudimos avanzar con todos los Convenios y obras.

A los cuatro concejales que quedan, se les suman cinco más, producto de la última elección, con lo cual vamos a poder avanzar con más proyectos e ir más a fondo en la gestión. Jamás voy a hablar de comodidad, contaremos con nueve ediles propios más alguno que nos acompañe para seguir transformando Quilmes. Fueron casi dos años en los que aprendimos muchas cosas, donde tomamos experiencia, donde nos formamos, ahora viene una nueva etapa que es seguir profundizando el cambio, fortalecernos y avanzar en las discusiones pendientes para transformar el distrito.

-¿Habrá cambios en el Gabinete?

Evalúo, no tengo decisiones tomadas todavía. Lo que entiendo es que gobernar es arriesgar, no vine a la gestión para quedar bien con nadie, quien no cumpla o vea que está haciendo las cosas mal, no estará más en este equipo; ya lo hemos vivido, he cambiado funcionarios que no estaban comprometidos con la gestión. No tengo cambios pensados pero seguimos haciendo transformaciones para el bien del quilmeño.

-Guillermo Galetto, actual Secretario de Gobierno, encabezó la lista de concejales ¿Va a asumir?-

Sí, va a asumir. Guillermo es una persona muy trabajadora, muy comprometida, un vecino de Quilmes, joven, honesto, que camina las calles del distrito con orgullo y ha demostrado un importante apoyo y compromiso con la gestión. Bien merecido tiene haber encabezado la lista. Fue un gran candidato.

-Entonces, si va a asumir ¿Quién ocuparía su lugar en la Secretaría de Gobierno?-

Estamos trabajando en eso, analizando perfiles.

-La presidencia del HCD le corresponde al oficialismo, más allá de que el cuerpo legislativo debe decirse por quién la ocupará. Hoy, la ocupa Juan Bernasconi, nombre que suena para ocupar la Secretaría de Gobierno…

La idea es que siga Juan, un hombre que ha demostrado mucho compromiso y que llevó la conducción del Concejo de la mejor manera. Creo que lo va a seguir siendo porque los ediles están conformes con su trabajo, porque ha sabido generar consensos, contener y ha permitido dar discusiones. Además, como espacio, estamos muy agradecidos por su labor, por haber sido el Jefe de campaña de un espacio amplio y plural como Cambiemos. Los resultados están a la vista.

Mensaje al vecino de Quilmes:

“Que se queden tranquilos, que hay un Intendente y un equipo de trabajo que trabajan día a día para cambiar lo que falta, que sabemos qué falta y que hay muchos proyectos para Quilmes.

Que se queden tranquilos, que María Eugenia –Vidal- y Mauricio –Macri- nos acompañan con las grandes obras que están a la vista, en ejecución. También, tienen que tener la tranquilidad de que les decimos la verdad, que damos la cara, no nos escondemos.

Que nos apoyen para poder continuar con este cambio, para que Quilmes nos vuelva a hacer sentir orgullosos.

Y que sepan que no estamos para apañar a nadie que haga las cosas mal. No vamos a tolerar corrupción u oscuridad en la gestión. Sincerándose la política, con funcionarios al servicio de la gente, haremos las transformaciones necesarias para recuperar el distrito en beneficio del vecino”.

La gestión en obras

A las obras ya mencionadas anteriormente, se suman: La descentralización del Municipio, en términos de atención ciudadana en todo el distrito; el plan de embellecimiento urbano “a cargo de artistas de primer nivel internacional que prevé pintar, a lo largo y ancho del distrito, 10 mil metros cuadrados en murales, para fin de año”.

La puesta en valor de la zona de la Ribera, con el apoyo de Nación y Provincia -embellecimiento, accesos, áreas verdes, paseos seguros y obras de infraestructura para evitar los efectos de la sudestada, “es un proyecto integral -uno de los pilares del Plan de obras 2017- que busca jerarquizar un lugar emblemático de la ciudad que ha caído en el olvido durante décadas”, explicó Molina.

“Con el conjunto de estas obras -que se están terminando- transformaremos definitivamente la Ribera, jerarquizándola, mejorando su infraestructura y la calidad de vida de sus habitantes. Además, se crearán fuentes de trabajo genuinas y nuevos polos de desarrollo en la ciudad y para toda la región”, sostuvo.

La recuperación de lugares públicos, “donde hicimos plazas porque consideramos que es el espacio más democratizador, más allá de las críticas que hemos recibido por eso”.

En materia de seguridad, “hemos inaugurado un centro de monitoreo, el más grande de la Provincia de Buenos Aires, un lugar cómodo, donde se monitorean 450 cámaras distribuidas por el distrito. La idea es llegar al fin de la gestión con 700/800 cámaras funcionando”, explicó. Asimismo, Molina sostuvo que han comprado móviles y equipamiento para la Policía local; que han mejorado el subsidio a los Bomberos y que existe un “trabajo articulado”, en situaciones de crisis, entre el SAME, Defensa Civil, bomberos, Policía y Policía local.

En tanto, explicó que dentro del edificio del Centro de Monitoreo se encuentra funcionando una de las bases del SAME local. Además, adelantó que en esas mismas instalaciones, dado su espacio, funcionarán algunos servicios municipales, “en línea con la descentralización”, donde se atendería la emisión de las licencias de conducir del distrito.

“Por todo esto, nuestra gestión es importante, se ve el cambio. Quilmes estaba muy caído, muy venido abajo, abandonado. El cambio se nota por donde los mires”, ponderó.

En materia de mejoras edilicias, 90 escuelas públicas del distrito recibieron en obras de reparación y mantenimiento el dinero del Fondo Educativo. “Cuando llegamos a la gestión había escuelas que no estaban en condiciones de iniciar las clases en marzo por cuestiones edilicias –goteras, agujeros en el techo, baños precarios, falta de agua. Así fue que las reparamos e hicimos más de 50 aulas de jardín de infantes y secundaria. Además, creamos los tres primeros jardines de infantes municipales –incorporamos a casi tres mil chicos a la educación inicial- y estamos creando dos más para que funcionen en 2018. Fue un trabajo enorme del área de Educación y Cultura, pero por sobre todo la voluntad política de intervenir para que los chicos vayan a la escuela y no sean expulsados por la situación edilicia”.

Mostrar más

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba