MARIANO MERA FIGUEROA:-El desafío es la cultura del trabajo
De vuelta a la política, Mariano Mera Figueroa, se ve acompañando a Julián Domínguez, actual Presidente de la Cámara de Diputados de la nación, para hacer prevalecer el proyecto nacional con la capacidad de liderazgo que lo caracteriza.
Por Gabriel Russo
Conversando con Figueroa Mera, supimos que sigue trabajando con compañeros de la política de los ’80.
“Hemos decidido acompañar a Julián Domínguez – actual Presidente de la Cámara de Diputados de la Nación- como expresión y liderazgo de nuestra generación entendiendo la situación política del país donde algunos quieren volver al modelo de país dependiente los grandes intereses económicos. Con Julián podemos hacer “pata ancha” en lo que hace al proyecto nacional y lo que falta que es la reforma social. Estamos viendo un país con problemas de exclusión grande y el desafío enorme para este tercer milenio tiene que ver con la inclusión. En materia social con justicia social, como acto de amor que logre sustituir la energía prebendista por verdadera organización comunitaria donde el trabajo sea el eje primordial de la recuperación del hombre.
Lo que pasa es que lamentablemente este un país que discrimina la pobreza…
Pero la pobreza está acompañada también de la injusticia. Hay niños bilingües informatizados y hay otros subalimentados. Es cuestión del Estado poner en práctica un proyecto verdaderamente pujante en lo educativo. La escuela tiene que ser inculcadora de valores. Hay que recuperar una formación que tenga que ver con el modelo de Argentina que se aspira. Hoy es infeliz el modelo, por abuelos en situación, y los que están en la calle. El país ha creado mucha riqueza y destinado recursos a las aéreas sociales, pero se requiere un cambio.
En Cuba que es pobre, los cubanos se bancan la pobreza, y son solidarios. Cuando les preguntas, dicen que el Che Guevara les planteó que tenían que ser solidarios. Allá hay escasa inseguridad, y mucha educación…
No puedo comparar a la Argentina con Cuba, pero creo que el principal elemento unificador es el trabajo. Acá hay resabios de algunas recetas del FMI como es el asistencialismo, que en su momento fue el elemento anestésico de las privatizaciones, el cierre de ferrocarriles, venta de la flota marítima y han generado parasitismo a lo largo de décadas. El peronismo tiene el desafío de acercar sus apotegmas. La cultura del trabajo es el elemento sustantivo. En eso estamos.
El Papa Francisco es el hombre de la humildad, la virtud y la doctrina y el espejo que buscamos en nuestro caso es una persona honrada, capaz y con liderazgo, humilde, y ése es Julián Domínguez, con las pautas para trabajar por el bien común, con una acción por los pobres creando condiciones de desarrollo, seguridad, donde el mérito se prestigie. La política debe ser el servicio más alto al bien común.
Los liderazgos son los que representan las grandes ideas colectivas. Después de tantos falsos profetas, estamos desesperanzados. Pero en Julián Domínguez hemos encontrado un camino.
¿Julián Domínguez participa de las PASO como candidato a qué?
En principio está conduciendo un proceso político, tiene que ver con un Congreso que hemos hecho por la continuidad del proyecto nacional en Mar del Plata. Profundizar lo que anda bien o transformar lo que entendamos que haya que cambiar.
¿River?
Si me lo preguntas como dirigente, mas allá del festejo, está en buenas manos.