Juegos Bonaerenses: Florencio Varela, sede del regional en futsal femenino y ajedrez
El Polideportivo Municipal “La Patriada” reúne en sus amplias instalaciones, durante el último viernes de agosto, una numerosa cantidad de deportistas tanto locales como visitantes con una meta clave: llegar a Mar del Plata.
“Es una instancia decisiva para Florencio Varela junto a los distritos de Quilmes, Berazategui, Lomas de Zamora, Lanús, Avellaneda más Almirante Brown que llegan a nuestra comuna para competir en futsal femenino y ajedrez”, explica el secretario de Cultura, Deportes y Recreación, Mauricio Rodríguez.
“Nuestro intendente -Andrés Watson- tiene la firme decisión política de promover estas iniciativas indispensables en el bienestar de la ciudadanía”, añade el funcionario quien destaca “la oportunidad de poner a disposición toda esta infraestructura en una etapa fundamental del tradicional certamen bonaerense”.
En el gimnasio central, hay gambeta y equipo con táctica para controlar la pelota hasta terminar en la red del arco contrario. Juana y Alba visten la casaca como dueñas de casa, anfitrionas del juego limpio.
La primera de ellas, hincha de “El Halcón”, practica la disciplina donde “expreso lo que siento”. La segunda recuerda su contacto inicial con el balón “desde los cuatro años; en este grupo, empiezo hace dos meses”. Ambas exclaman “Messi” como el principal referente.
Giselle, profesora, enumera las diversas versiones: “Playa, tenis, masculino sub 14 en fútbol 11”. Confía en la edición 2024, con un bagaje de “medalla de oro, plata y bronce”. Fabián, ayudante de campo, afirma: “Tenemos muchas ganas y entusiasmo”.
En el salón de usos múltiples, el combate es sobre el tablero con una atmósfera densa y un silencio abrazador. El tiempo también es un rival, pero el mejor estímulo a encontrar la estrategia antes que la o el oponente.
Héctor Duarte es el coordinador varelense y merodea junto a cada docente por las mesas dispuestas. “Es la cuarta vez que somos sede, es un honor. Para ello, es imprescindible la gestión del Ejecutivo”, comenta.
Al introducirse en un mundo de piezas monárquicas, el hombre aprecia “una herramienta muy potente en el fuero escolar”. “La concentración, aceptar mi error. La hipótesis: mi defensa, mi ataque y el del otro u otra”, revela. “Las neuronas potenciadas al máximo”, concluye.
