Crisis de seguridad y gestión en Merlo, un municipio al borde del colapso

En una entrevista exclusiva, con David Zencich, concejal de Merlo y representante del PRO, nos habla sin tapujos sobre la crítica situación que atraviesa el municipio bonaerense. Desde la falta de inversión en seguridad hasta el abandono de obras emblemáticas, el diálogo revela un panorama desolador y una gestión municipal que, según él, ha fallado en atender las necesidades más urgentes de los vecinos.

 – Comencemos por lo más urgente: la seguridad. ¿Cómo describiría la situación actual en Merlo?

La situación es crítica. Merlo está atravesado por una ola de inseguridad que no parece tener fin. La gente está harta, cansada de ver cómo los políticos se echan la culpa unos a otros mientras los delitos aumentan. El problema es que no hay inversión real en prevención. El presupuesto que se destina a protección ciudadana es menos del 1% del total, y eso no alcanza ni para ponerle nafta a los patrulleros. Es una burla.

-¿Cómo se compara Merlo con otros municipios en términos de seguridad?

Mire, en Vicente López, por ejemplo, el 10% del presupuesto se destina a prevención. Allí tienen cámaras de seguridad, sistemas de monitoreo en tiempo real y patrullas que actúan de inmediato ante cualquier alerta. En Merlo, en cambio, las cámaras están, pero nadie las vigila. Llegamos siempre después del delito, nunca antes. Es como si aquí no les importara la seguridad de los vecinos.

-¿Y qué hay de la policía? ¿Cuál es el estado de las fuerzas de seguridad en el municipio?

La policía no da abasto. Faltan efectivos, faltan recursos y, sobre todo, faltan herramientas. Tenemos patrulleros viejos, algunos con más de dos años de uso, que ya deberían estar fuera de circulación. Pero no hay recambio. Y lo peor es que las camionetas que tenemos no están blindadas, y el personal que las maneja no es policial. Es una situación de alto riesgo para todos.

-Además de la seguridad, hay otro tema que preocupa a los vecinos: las obras públicas. ¿Qué pasa con el famoso puente de la estación de Merlo, que lleva más de 10 años sin terminarse?

(Suspira) El puente es el símbolo del abandono. Se empezó en 2015 y ahí quedó, a medio hacer. Es increíble que en un lugar tan emblemático, por donde pasan miles de personas todos los días, tengamos un monumento a la desidia. El problema es que no hay acuerdo entre el gobierno nacional y el municipio. Se discuten detalles como si el puente debería tener bajadas directas al andén, como en Padua, y mientras tanto, la obra está parada. Es una falta de respeto a los vecinos.

-También hay denuncias sobre el estado de la plaza de la estación de Merlo. ¿Qué está pasando allí?

La plaza es otro desastre. Está llena de chicos que consumen drogas, se pelean, generan un espectáculo lamentable. Es la primera imagen que tienen los que llegan a Merlo en tren, y da una pésima impresión. Pero parece que al intendente no le importa. No vive aquí, no ve lo que pasa todos los días. Si viviera en Merlo, quizás entendería la urgencia de actuar.

 -Hablando de inundaciones, ¿cómo está el municipio en términos de prevención y gestión de emergencias?

Mal, muy mal. Cada vez que llueve, nos inundamos. Y no es solo por la falta de obras, sino por la falta de mantenimiento. Las bocas de tormenta no se limpian, y cuando hay alertas meteorológicas, no hay un plan de acción. Es como si no les importara. La prevención es clave, pero aquí no se invierte en eso. Y al final, siempre terminamos gastando más en reparar los daños que en evitarlos.

– Cambiando de tema, ¿cómo ve el panorama político actual en la provincia de Buenos Aires? ¿Cree que es posible un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza?

Creo que es necesario. Tenemos que unir fuerzas para derrotar a la mafia que tiene secuestrada a la provincia. Hemos hablado de la posibilidad de un acuerdo programático, más allá de las elecciones. Las ideas son similares: invertir en seguridad, reducir el gasto innecesario y priorizar las necesidades de la gente. Pero cada uno debe prepararse por su cuenta primero. Si no funcionamos solos, difícilmente funcionemos juntos.

-Finalmente, ¿qué mensaje le daría a los vecinos de Merlo que están cansados de esta situación?

Les diría que no bajen los brazos. Nosotros, desde nuestro lugar, vamos a seguir trabajando para mejorar la situación. Presentamos una emergencia de seguridad por segunda vez, porque creemos que es necesario actuar ya. Pero también necesitamos que los vecinos exijan, que no se queden callados. Merlo puede ser un lugar mejor, pero para eso necesitamos una gestión que realmente se preocupe por su gente.