Basta de muertos por precarización
La Asociación Sindical de Motociclistas, Mensajeros y Servicios (ASIMM) difundió un duro comunicado en el que comenta lo expuestos que están los trabajadores de la actividad en este momento.
«Esto ya supera la pelea por reconocer relaciones laborales, discutir encuadramiento, o respetar la normativa vigente», comienza diciendo la gacetilla.
«Estamos ante la colisión de dos mundos, de cosmovisiones opuestas; es la lucha de los valores humanistas y cristianos, contra la inmoralidad de los que abrazan a la «alta finanza» en desmedro de la Justicia Social y desprecio por la vida misma.
El viernes pasado un trabajador murió en la ciudad de Rosario, atropellado por un colectivo. Claro, ser víctima de un siniestro de tránsito le puede pasar a cualquiera. Pero morir habiendo sido condenado a trabajar a destajo, sin capacitación, sin obra social, sin ART, sin derechos, por «monedas», y en total estado de abandono, es patrimonio cuasi exclusivo de aquellos que sitiados por el hambre y la miseria, caen en las garras del modelo de explotación de las plataformas de mensajería y reparto.
Las plataformas tienen las manos manchadas con sangre, en este caso PedidosYa y su Gerente Sebastián Genesio, pero llegó el momento de que cada actor asuma el porcentaje de responsabilidad que le toca en esta desgracia. Los consumidores ya no pueden mirar para otro lado, finjiendo que no saben lo que pasa. Ya no hay espacio para la corrección política, ni para planteos cómodos. Para las «aplicaciones» somos apenas un puñado de seres humanos descartables; los «FACILITADORES» de que ellas puedan seguir facturando inclusive en medio de una pandemia mundial.
Cuando en una publicidad dicen que «PONEMOS LO MEJOR DE CADA UNO», la única realidad es que LAS EMPRESAS NO PONEN NADA y LOS TRABAJADORES PONEMOS LA VIDA. Y aunque dichas empresas inviten a los clientes (en lo que pareciera ser una mezcla de cinismo y humor negro) a «lavarse las manos antes y después de cada pedido», los motociclistas y ciclistas les decimos a los usuarios del servicio: «No somos héroes, somos trabajadores explotados y silenciados. NO TE LAVES LAS MANOS».
#NoSoyMiPropioJefe
#NoSomosHeroes
#SomosTrabajadoresExplotadosYSilenciados
#ASiMM
