¿Aún tomas café en vasos de tergopol? Mirá lo que sucede….
No se recomienda tomar café en vasos de tergopol, también conocidos como vasos de unicel, ya que estos materiales pueden liberar microplásticos en la bebida. La alta temperatura de las bebidas calientes facilita que se desprendan microplásticos del interior del vaso y se mezclen con el líquido. La exposición repetida a estos contaminantes puede tener efectos en la salud a largo plazo. Los microplásticos ya están presentes en los seres vivos recién nacidos.
Los nanoplásticos podrían impactar en el estado de ánimo y el comportamiento.
Un reciente estudio evaluó la actividad cerebral en regiones relacionadas con la dopamina, un neurotransmisor que regula el estado de ánimo, en ratones a los que se suministró nanoplásticos en diferentes etapas de su desarrollo.
Un experimento con ratones, adelantado por investigadores de la Universidad Católica de Daegu (Corea del Sur), sugiere que los nanoplásticos podrían alterar el desarrollo del cerebro, informó este jueves el portal PsyPost.
Los nanoplásticos son fragmentos de ese material con menos de un micrómetro de diámetro. Como referencia, su grosor equivale a una septuagésima parte del de un cabello humano.
De igual manera, se ha considerado que los nanoplásticos son más dañinos para los humanos que los microplásticos, ya que al ser lo suficientemente pequeños pueden introducirse en las células humanas, el torrente sanguíneo y en algunos órganos. Incluso, se ha documentando que a través de la placenta pueden penetrar en el cuerpo de los fetos.
Los microplásticos ya están presentes en los seres vivos recién nacidos
Un artículo publicado en la revista Neuroscience da cuenta de los resultados de la investigación, que consistió en administrar oralmente nanoplásticos a ratones preñados y a otros roedores en diferentes etapas de su vida, desde la gestación hasta la adultez.
El experimento evaluó el comportamiento locomotriz y social y la actividad cerebral en zonas relacionadas con la dopamina, un neurotransmisor que ayuda a controlar las capacidades motrices y también funciones asociadas al estado de ánimo.
Efecto dañino
De acuerdo con los autores del estudio, un grupo de roedores machos que estuvo expuesto a nanoplásticos en su última etapa de gestación y al principio de su edad adulta presentó problemas en su comportamiento social, puesto que mostraban una menor tendencia a la familiaridad y una mayor conducta ansiosa, como quedarse paralizados cuando eran colocados en lugares desconocidos para ellos.
A su vez, se constató que su actividad cerebral en las zonas vinculadas con la dopamina, como la corteza prefrontal y la amígdala, se vio interrumpida. De otra parte, los ratones a los que se les suministró nanoplásticos durante la mitad de su gestación mostraron un movimiento reducido, mientras que aquellos que los recibieron en su adolescencia tuvieron una mayor actividad cerebral, aunque no mostraban cambios significativos en su comportamiento.
Según PsyPost, a pesar de que la investigación tuvo limitaciones, puesto que se centró en roedores machos, sus resultados son significativos. En particular, aportan evidencia de que los nanoplásticos pueden ocasionar afectaciones en el cerebro, además de tener otras implicaciones de gran alcance en la salud humana. Fuente. Agencias.