Con esta afirmación en términos matemáticos aplicados a la política, se refirió el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel a la necesidad de que Argentina busque la unidad en la diversidad, “si queremos superar las dificultades,-recomendó enfático al ser entrevistado en exclusiva para nuestro Medio sobre el contexto internacional y la situación actual de la Argentina. Pérez Esquivel recibió en esta ocasión el Premio José Martí conferido por el Centro de Estudios Sociales y Culturales “Azucena Villaflor”.
¿Cuánto cree que ha cambiado el panorama político internacional desde la época lejana en que usted se inició en las luchas sociales, a este tiempo convulso que estamos viviendo?
Los pueblos no tienen un camino constante porque suben y bajan. Hubo fuerte represión durante las dictaduras militares, después recuperamos las democracias formales, y hay que tener en cuenta que la democracia no se regala, se construye y esto depende de los pueblos-conceptualizó el Nobel de la Paz y fundamentó:
“Hubo revoluciones como la sandinista que fue destruida por EE.UU, el bloqueo a Cuba que todavía persiste lamentablemente. Aparecieron figuras importantes en el continente como Hugo Chávez que buscó la unidad continental, eso de construir la Patria grande, el sueño de los libertadores, y aparecieron figuras también como Evo Morales en Bolivia que quería recuperar la soberanía, los recursos, la decisión de tomar resoluciones y recuperar la pluriculturalidad de la vida del pueblo.
Sin embargo de esa Patria grande y de esa unidad de los líderes latinoamericanos poco queda, o casi nada porque se ha encargado la “mano negra” de EE.UU de desintegrarla. ¿Está de acuerdo con mi apreciación?
Sí, tenemos que ver que hubo experiencias pilotos. Ya a los militares no le sirven y comenzaron a montar un andamiaje que funciona hasta hoy, que son los golpes de estado “blandos”, como el de Honduras contra Manuel Zelaya con la complicidad de jueces, parlamentarios, traidores a los objetivos del pueblo. Después en Paraguay contra Fernando Lugo y lo último y muy preocupante fue la destitución de Dilma Rousseff.
Fui a Brasilia en ese entonces cuando ella estaba en el gobierno y hablé en el Senado de donde dije: vengo a saludarlos, pero tengo que decirles que le están dando un golpe de estado a Dilma Rouseff. Y se armó un lio tremendo…esa fue la avanzada para sacar del medio a Lula creando falsas acusaciones. Fíjese que Moro viaja permanentemente a Estados Unidos a recibir instrucciones. Y así como fue la doctrina en la seguridad nacional, hoy es esta política de imponer el modelo neoliberal a cualquier costo.
Hablando de neoliberalismo, aterrizamos en la Argentina donde justamente y a través del voto democrático asumió al poder Mauricio Macri con un modelo neoliberal que está aplicando medidas de ajuste brutales contra el pueblo argentino. Incluso el Papa Francisco no ha querido visitarnos todavía ¿Cuál es su visión al respecto?
Hay que reconocer que Macri llego a través de las elecciones. El kirchnerismo tuvo aciertos pero también muchos errores y esto llevó a que este hombre con el apoyo de un partido tradicional como el radical que lo apoyo en su alianza, se haya llegado a esta situación. Macri, lo que hizo fue, aparte de una economía para pocos y desocupación y hambre para muchos, después de tener por tempore la presidenta del UNASUR, no hizo absolutamente nada. La dejó morir y cuando le tiene que entregar la presidencia a Bolivia, seis países se retiran por orden de los Estados Unidos.
¿Cómo valora ese hecho?
Esto es una traición a los pueblos, es la desintegración continental, es una situación muy dolorosa para todos, pero también creo que mirando hacia adentro, las izquierdas aquí tendrían que volver a la escuela.
¿Por qué?
Porque se han olvidado de dos operaciones matemáticas fundamentales. Sumar y multiplicar. Hay que partir de los acuerdos, no de las diferencias, porque significan restar y dividir. Por eso es importante sumar y multiplicar –reiteró-, aunque no estemos del todo de acuerdo- aclaró el Nobel-pero hay algunos ejes que son fundamentales, porque si no, “esta gente” va a seguir regalando la soberanía, imponiendo a los países la recolonización.
¿Por qué tenemos que estar pendiente del dólar-se preguntó Pérez-.Esta economía no es real, sino especulativa -definió- que se majea por sensaciones donde en un día sube y baja la moneda-
¿Comparte la idea de que el gobierno de Cambiemos se encuentra en una encrucijada con el nuevo préstamo que le está solicitando al FMI?
Esa película ya la vimos y ha sido un drama nefasto. Volver a esto llamando incluso a Domingo Cavallo es un retroceso, una falta de visión. No es que no tengan memoria es que el modelo de ellos (Cambiemos) es la reducción del Estado a un ente administrativo, no a políticas públicas. Por eso reducen los presupuestos en educación, en salud, en derechos cívicos y el pueblo va perdiendo cada vez la libertad. También nuestros pueblos tienen su capacidad de resistencia social, cultural y política, pero fundamentalmente tenemos que buscar lo que nos une, identifica y da pertenencia. Apostamos a eso.
¿Cree posible en estos momentos la unidad del campo popular con un PJ que tiene a Barrionuevo y demás a la cabeza?
Hay que rescatar lo mejor del peronismo, donde hay gente valiosa como también las hay en el radicalismo y de los distintos partidos políticos, sentarlos a analizar.
Estamos pensando en lanzar una propuesta de diez puntos por un debate más profundo, para ver en qué estamos de acuerdo y en qué no, qué es la economía solidaria. Hay proyectos, experiencias. Por ejemplo las cooperativas de trabajo, las fábricas y tenemos que repensar el país que queremos para todos.
Unidad en la diversidad
Al recibir el premio José Martí, por su sostenida lucha a favor de la Argentina condenada hoy a la pobreza por las ambiciones neoliberales, Pérez Esquivel usó de la palabra y referenció el Foro social mundial “Otro mundo es posible”, para señalar que “ello es posible si tenemos la capacidad de la unidad. “Tenemos que preguntarnos por qué este gobierno llegó a donde está y por qué está destruyendo todo lo que se hizo- destacó el Nobel-.
“En Argentina, si queremos superar las dificultades, tenemos que unirnos en la diversidad,- recomendó- “la gran riqueza de los pueblos es esa”-señaló enfático-
Además, alertó sobre la recolonización de nuestros países y la entrega de nuestros recursos a manos de las corporaciones extranjeras. “Estamos frente al desafío del hambre, pero también hay esperanza porque hay capacidad de resistencia de los pueblos. Y advirtió que los grandes medios de comunicación están en manos de los intereses económicos, a la vez que se refirió al armamentismo que se financia con las drogas.
“José Martí es una luz que nos guía, acompaña da coraje para seguir la lucha-concluyó el destacado luchador por la paz, quien no solo reconoció que tuvo peleas con el kirchnerismo, pero que considera que ha sido honesto en apoyar lo bueno que se ha hecho y por eso estuvo reunido con Cristina, “hemos conversado y tratado de superar dificultades y encontrar nuevos caminos”-confesó-.
