JORGE FRIAS: Dolor por el naufragio del barco pesquero
Mientras continuaba la búsqueda de los cinco tripulantes desaparecidos en el naufragio del barco pesquero San Jorge I, frente a Villa Gesell, se hizo público un un comunicado firmado por Jorge Frias, secretario general de la Asociación de Capitanes de Pesca. Consultado al respecto, Frias comentó a Comunas:
Por Gabriel Russo
¿Qué síntesis se puede hacer de este hecho?
Recién estamos tratando de tomar conocimiento de lo que sucedió, nos hemos reunido con uno de los marineros que pudo alcanzar la balsa y salvar su vida, hijo de un amigo personal y hay un hermetismo importante en cuanto a dar información por parte de Prefectura, en detalles.
¿Cuántos muertos hubo?
Hasta el momento tienen carácter de desaparecidos, pero hay que ser realistas hay muchas horas de ausencia y no podemos esperar más que lo temido, son cinco desaparecidos.
¿Cómo paso esto?
Me contaba el muchacho en estado de shock importante – que el buque no estaba pescando sino haciendo tareas en la cubierta, la máquina se paró, vieron al capitán dirigiéndose hacia la maquina y ahí da vuelta de campana el barco, no pudo hacer más que salvar su vida este chico,
Esperamos que cuando los médicos le autoricen a hacer las declaraciones pertinentes veremos algo oficial.
¿Este tipo de buque que características tiene?
Tiene 20 metros de eslora ,carga 1 500 cajones de pescado, unas 60 toneladas más o menos. De color amarillo pescaba a 70 kilómetros de la costa, no es un barco de gran porte pero realiza una actividad normal, en la zona autorizada, no había nada irregular
¿En la historia se han producido muchas tragedias de este tipo?
En la diversidad de accidentes en la pesca donde yo he sido parte de uno, en el ‘89 viví un naufragio en la Patagonia con el agravante que perdió la vida mi hermano. Hay mucha historia de naufragios por distintos motivos, en los tiempos más cercanos por casualidad en 2007 San Jorge I precedió otro San Jorge que naufragó, – también dio vuelta de campana-, pero no hace más de un mes frente a las costas de Comodoro Rivadavia otra embarcación zozobró, pero afortunadamente no hubo víctimas.
¿Esto tiene que ver con ineficiencia del que maneja, o con el clima?
Puede ser una conjunción de una y otra; hay un caso del buque San pablo en el puerto Rawson en el cual participé en pericias porque estamos cuestionando que muchas veces para lograr dar respuesta a tres factores necesarios para la construcción de un pesquero, que uno es la seguridad navegación, otro la habitabilidad para los trabajadores y la capacidad de bodega , conjugar esas tres cosas a veces hace salir de los limites la seguridad del buque, en el caso del buque de Rawson. Se han construido buques que cuentan un calado escueto, mucha altura (mucha vela y exposición al viento) y poco calado para encontrar equilibrio ante una marejada. Esto requiere de quien esté al mando, una pericia óptima y ni el menor descuido.
No es tan inusual que ocurran estos accidentes.
Por último, Frías se refirió también a que es fundamental el error humano.
Acerca del comunicado explicando el hecho con titulo conmovedor “pido perdón en nombre de muchos”. Lo hice porque es un reproche hacia el prefecto actuante porque a mi entender y del padre del capitán no tuvo la sensibilidad para darle el lugar a los familiares y tener una recepción personal donde se le pueda dar información precisa de lo que ocurrió y el rescate, asistencia ay traslado, horas después los familiares no tenían certeza sobre los familiares, esto es un desatino y falta de sensibilidad, Cuando el buque rescató a los que lograron alanzar la balsa, el puerto estaba prácticamente vacío, y muchos privo de acompañar a un momento tan delicado a los tres que llegaban y expresar el agradecimiento al capitán y los tripulantes del buque que también hicieron un esfuerzo mas allá de su obligación.
Ver un muelle vacío donde no hubo motivación ni del párroco de la iglesia, ni el intendente, todo eso hizo la necesidad de emitir ese comunicado. No se puede aceptar tanta indiferencia hacia el valor de la vida.
Es importante aclarar que mis palabras no fueron de enojo, sino de dolor, afortunadamente ya el intendente y el prefecto han cambiado su actitud y se han acercado a los familiares para cambiar esta situación. Celebro esto.