Legislatura Porteña aprobó auxilio financiero para comercios de la ciudad
Los comercios de esta capital dedicados a la venta de bienes o prestación de servicios, quedaron exceptuados de pagar el impuesto Inmobiliario y la tasa de ABL correspondiente a junio y julio.
Así lo determinó una ley sancionada por los legisladores porteños, por iniciativa del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
El beneficio abarca a los titulares de dominio, los usufructuarios, los titulares de derechos de superficie y los poseedores a título de dueño de los locales comerciales que desarrollan actividades de venta de bienes muebles y prestaciones de servicio.
También alcanza a los locales de actividades gastronómicas (restaurantes, bares, cafeterías, pizzerías, casas de comida, heladerías, «fastfood», entre otras).
La medida se extiende a los inmuebles donde se desarrollan las actividades hotelera, alojamiento, pensiones, geriátricos, albergues transitorios y moteles.
Del mismo modo, alcanza a quien por contrato se hizo cargo del pago de esos tributos en su condición de locatario o comodatario.
No están comprendidos en el beneficio los comercios o servicios que fueron considerados «esenciales», y los locales de actividades financieras y de empresas dedicadas al cobro de contribuciones y servicios.
Según la ley, a quienes tramiten el otorgamiento de esta condonación, se les requerirá tener las habilitaciones correspondientes a sus actividades y será la Administración General de Ingresos Públicos (AGIP).
Pero quienes efectuaron o efectuaren los pagos de Inmobiliario y ABL de junio y julio 2020, tendrán un crédito a favor para cancelar futuros obligaciones fiscales ante la AGIP, «no dando lugar a reintegros o repeticiones», aclaró la ley.
De manera similar, se condonaron las cuotas con vencimientos en junio y julio a los responsables del pago de Gravámenes por Uso, Ocupación y Trabajos en el Espacio Público (Superficie, Subsuelo y Espacio Aéreo), con puestos de venta ambulante por cuenta propia o de terceros y con vehículos gastronómicos.
La ley se sancionó con 55 votos positivos, y la oposición o abstención de los cuatro diputados de izquierda.