El poder adquisitivo del salario mínimo en Argentina ha acumulado una caída del 30% entre noviembre de 2023 y febrero de 2025. Según un informe del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la Facultad de Ciencias Económicas, el salario mínimo en febrero de 2025 se ubica por debajo de los niveles de 2001, antes de la crisis de la convertibilidad.

El informe, coordinado por Roxana Maurizio y Luis Beccaria, destaca que en diciembre de 2023, el salario mínimo registró una caída del 15%, que se profundizó con una nueva baja del 17% en enero de 2024. A pesar de un leve repunte en los meses siguientes, la pérdida acumulada de poder adquisitivo es significativa, lo que deja al salario mínimo en un valor inferior al que alcanzó en la previa de la crisis de 2001.

La evolución del salario mínimo y sus consecuencias

El salario mínimo pasó de los $292.446 en febrero a $296.832 en marzo de 2024, pero sigue siendo insuficiente para cubrir las necesidades básicas de los trabajadores. Según el IIEP, la pérdida real del salario alcanzó un 61% desde el pico más alto de la serie, registrado en 2011.

Este fenómeno está relacionado con una aceleración inflacionaria que afectó principalmente al poder de compra de los trabajadores más vulnerables. Las negociaciones para los aumentos salariales se han estancado en los últimos meses, y el gobierno sigue definiendo los incrementos por decreto debido a la falta de acuerdos entre empresarios y sindicatos.

La situación del empleo en el sector privado

Por otro lado, el empleo formal del sector privado muestra señales de estabilización. Según los datos, en diciembre de 2024 había 6,25 millones de trabajadores asalariados formales, pero la tasa de crecimiento del empleo fue débil. Aunque se observó un repunte en algunos meses, en comparación con el año anterior, hubo una pérdida de aproximadamente 105.000 puestos de trabajo, lo que equivale a una caída del 2%.

Si bien el empleo privado muestra una ligera recuperación, no es suficiente para contrarrestar las pérdidas que los trabajadores sufren en términos salariales. Este contexto hace que muchos busquen alternativas fuera del mercado laboral formal, lo que complica aún más la estabilidad del sector.

Los gremios continúan reclamando aumentos salariales. En diciembre de 2024, pidieron que el salario mínimo llegara a $572.000, pero este pedido fue rechazado por los empresarios. Las autoridades del gobierno ya han anunciado aumentos marginales, pero estos siguen siendo insuficientes para frenar la caída del poder adquisitivo.

Norma Lezana, secretaria general de la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan, advirtió que muchos trabajadores buscan alternativas fuera del sector público debido a la insuficiencia de los salarios. Esto refleja una tendencia más amplia en la que los trabajadores del sector privado también se sienten presionados por la falta de reajustes salariales adecuados. FUENTE.   GLP